viernes, 23 de diciembre de 2011


Hoy, mientras estaba en el trabajo recibí una llamada. Al escuchar la voz de mi interlocutor me dió ese pellizco de alegría que sientes cuando te llama alquien muy querido. Algunos lo conocéis: Bonifacio Jimenez. Bony. Probablemente una de las mejores personas que pisan suelo terrícola. Este blog es un regalo de Reyes para él, y por extensión para todo aquél que entre con el sano afán de quedarse un rato en familia. Pongo mi creatividad y mi memoria a vuestra disposición. Y me prometo dedicarle entregas regulares a este blog.